En uno de los barrios más tóxicos de EE. UU., los vecinos conviven con una incineradora de residuos, una planta de tratamiento de aguas cloacales, un aeropuerto, un puerto marítimo y miles de camiones que liberan químicos tóxicos. El documental acompaña a María en su lucha por la justicia ambiental y por un futuro justo y sostenible.